lunes, 6 de enero de 2014

SOBREDOSIS DE COMAS






Te levantas, como cualquier día, repasas oraciones, mantras, aseo, alimentas al gato, suena la canción que despierta al día,  lees las noticias aunque prometes no dejarte contaminar por la realidad, paras, intentas la metáfora, se te atraganta el poema, te refugias nuevamente en esos 140 caracteres que te resumen el mundo, que desnudan un país, te sobran los motivos para fracturar la esperanza, se  esconden los conceptos de resistencia, tolerancia, te cuestionas, te deprimes, se acaba el chocolate, se opacan las buenas noticias, se propaga la orfandad, sí, la orfandad, porque cada día un niño pierde a su padre, pierde a su madre, todos saben, nadie dice, prohibida la ira, el llanto, prohibido el rojo en la sangre, de nuevo las oraciones, los mantras, el gato entiende, no come, se sienta al lado y acompaña, una noticia descuella, la sangre no sabe ocultar su color, la niña no entiende el rojo en su pierna, en los cuerpos inertes de los padres, la niña no entiende, llora, siente miedo, mucho miedo a tanto rojo, miedo de ese rojo que le mutiló el futuro, tú también sientes miedo, asco, no más rojo, suplicas porque este país pueda amanecer desteñido.


Georgina Ramírez